Sí, nos encanta leer referencias, zambullirnos en las opiniones y experiencias ajenas para tomar decisiones personales. En algunos casos, esta es la única vía de hacer un análisis de mercado porque, vayamos al grano, nadie podría conocer en profundidad a todos los profesionales con los que podemos atendernos -incluso, si nuestro prestador de salud tiene una oferta limitada-, claro está.

En otro casos, la pregunta comparativa es la manera más fácil y vaga de recibir percepciones foráneas. Sí, aceptémoslo. Que otros nos den respuestas nos ahorra el laburito de movernos y averiguar directo en la fuente.

Hoy quiero desentramar esta pregunta que además de no aportarnos demasiado en lo que obtendremos, puede ser peligrosa. Y aquí voy con algunos de los miles de ejemplos con los que me encontré en los últimos años:

NdE: Los nombres fueron modificados adrede para preservar privacidad… igual los que inventé son geniales y mejores, tho.

1- ¿Alguien puede decirme cuál es el mejor médico del centro Zoidicito?

2- Mi obra social me cubre en Fertichot y Prengverg: ¿cuál me recomiendan?

3- Entre los médicos Romualda Ovulosauria, Floripondio Blastoch y Jacinta H. Salpinx ¿cuál me recomiendan?

4- ¿A qué obra social que acepte monotributistas me recomiendan afiliarme que tenga buena cobertura y no hagan lio a la hora de presentar papeles?

Tomo estos tres ejemplos como ejes principales para el análisis. Y con esto basta, créanme.

Tenemos una premisa general que es que el sujeto pasible de esgrimir una “opinión” contundente con valoración aceptable, deberá haberse atendido con todos los sujetos del análisis de cada cuestión puesta a la consulta pública.

No es inocente ni un error las comillas en la palabra “opinión”, puesto que la respuesta a cualquiera de esas preguntas estará basada en las psiquis, modelos mentales, información que tenga el sujeto que experimentó las variables puestas a análisis, y enmarcadas en una temporalidad y espacio que directamente influye sobre el sujeto y su vivencia. Las opiniones no son pasibles de características objetivas; aunque para el sujeto per se que tenga conocimiento sobre análisis y estandarización de datos, pueda aproximar una conclusión fundamentada y aceptable.

Ahora bien vayamos al punto G de esta publicación científica, al analizar los casos propuestos:

1- Una respuesta más o menos cercana a la que se pretende, será dada por un sujeto que haya experimentado la misma cantidad de consultas médicas, los mismos tratamientos y técnicas, con cada una de las personas que ejercen la medicina reproductiva en Zoidicito. Por lo tanto esta pregunta comparativa es ridícula porque nadie testea al plantel médico de una clínica en su totalidad.

2- Similar caso sucede en este segundo intento de elegir bien la clínica. Al punto anterior habría que agregarle hacer el mismo trabajo de testeo pero en las dos sucursales reproductivas Prengverg y Fertichot. Doble laburito, mamita.

3- En este caso similar, el peligro subyace en lo puntual del referéndum. Sólo un humanoide que se haya atendido con Ovulosauria, Blastoch y H. Salpix, haya efectuado la misma cantidad de consultas por el mismo período, se haya realizado los mismos tratamientos y técnicas con cada uno, podrá esgrimir una opinión más o menos completa sobre ambos, llegando así a una elección tangencialmente objetiva (nunca objetiva por lo anteriormente comentado).

La pregunta 4 es una huevada, ya que todas hacen quilombo al momento de presentar papeles y ponen un ‘pero’ al momento de cubrir. Por eso, queda afuera del análisis.

Conclusiones:

Considerando que nadie puede tener los mismos datos de todas las variables, que las opiniones dependen de las preferencias, gustos y vivencias puntuales de quien experimenta y las variables que afectan su percepción: ninguna de las preguntas llevarán al objetivo planteado e incluso podrían presentarse desviaciones y pérdida de oportunidades.

Soluciones:

Para obtener información que nos permita tomar decisiones, es mandatorio realizar bien la pregunta: “¿Qué experiencias tienen en Fertichot en alta complejidad? ¿Alguien que se haya atendido con Ovulosauria, Blastoch o H. Salpix me podría comentar cómo se maneja en las consultas?” Siempre teniendo en cuenta que se recibirán opiniones.

La otra es hacer como hizo quien suscribe, tomar varios turnos e ir a entrevistarse con varios candidatos para conocer lugar, formas y detalles para luego decidir.

Aprovecho la presente para aclarar que no, que no doy recomendaciones de clínicas ni de médicos. Si quieren, en otra publicación puedo compartirles cuales son las valoraciones profesionales que yo realizo al momento de tomar esta clase de decisiones. Díganme qué les parece en los comentarios.


Soy Maru Pesuggi, autora del libro ¡Que me parta un Milagro!, me tocó atravesar un largo camino hacia la maternidad y hoy sigo acompañando el viaje de otros…

¿Todavía no lo leiste? El libro: http://libro.quemepartaunmilagro.com.ar

Leave a Comment